19 de julio de 2023 3 min leer
Las pestañas postizas son el arma secreta de cualquier chica. En sólo unos segundos, pueden transformar la línea de tus pestañas de cortas y planas a voluminosas y gruesas con una sencilla aplicación. Pero para sacar el máximo partido a estos potenciadores mágicos de pestañas, tienes que saber cómo usarlas como una profesional.
En este blog, hablaremos de algunos consejos esenciales que te ayudarán a dominar el arte de las pestañas postizas.
Las pestañas postizas vienen en un tamaño estándar, lo que significa que para conseguir el ajuste perfecto hay que personalizarlas un poco. Antes de aplicar la pestaña postiza, sujétala contra la línea de las pestañas y calcula la longitud que necesitas. Luego, con unas tijeras, corta la pestaña a la longitud deseada.
Existen dos tipos principales de aplicación de pestañas: con pegamento o con imanes. Sea cual sea el que utilices, debes asegurarte de que tu técnica de aplicación de pestañas sea lo más fluida posible. ¿Por qué? Porque cubrir accidentalmente tus pestañas naturales con pegamento para pestañas o sujetar tus pestañas magnéticas en el lugar equivocado puede dañar rápidamente tus pestañas naturales.
Recuerda, ¡la práctica hace al maestro!
La mayoría de los postizos se pueden utilizar una y otra vez, pero para sacarles el máximo partido hay que mantenerlos en buen estado. Te recomendamos que limpies los restos de maquillaje de tus postizas después de quitártelas. Si no lo haces, los restos de maquillaje, como la máscara de pestañas, pueden hacer que las fibras del postizo se vuelvan más quebradizas y aumenten las probabilidades de rotura.
Además, la limpieza de las pestañas postizas también elimina cualquier bacteria que pueda haber por ahí, protegiendo las pestañas naturales de inflamaciones o infecciones.
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Cuando combines las pestañas postizas con el maquillaje, intenta siempre utilizar la menor cantidad de producto y terminar la mayor parte posible del maquillaje antes de añadir las pestañas postizas. Si aplicas primero el maquillaje y después las pestañas, mantendrás tus pestañas en perfectas condiciones para que puedas utilizarlas una y otra vez.
Aunque es necesario, el pegamento para pestañas causa estragos tanto en las pestañas postizas como en las naturales. Si usas demasiado, lo más probable es que te queden grumosas, imposibles de desenredar y que acaben dañando tus pestañas. Por lo tanto, utiliza poco pegamento y asegúrate de aplicarlo con precisión en la línea de las pestañas, para que no se corra ni se derrame sobre las pestañas naturales.
Si has seguido todos estos consejos hasta ahora, tus pestañas postizas estarán en perfecto estado. Eso sí, ¡no eches a perder todo ese trabajo intentando arrancarte las pestañas a toda prisa al final del día!
Si utiliza adhesivos, lea nuestro blog que explica cómo disolver suavemente el pegamento de las pestañas antes de intentar retirarlas. Si usas magnéticas, desengancha suavemente las pestañas y retíralas lentamente, idealmente con pinzas. Esto no sólo protegerá tus pestañas postizas, sino que también evitará que arranques alguna de tus pestañas naturales.
Aquí hemos elaborado una comparativa de los distintos métodos de aplicación de las pestañas postizas. Sin embargo, de lo que hemos hablado hoy se desprende claramente que lo que todo el mundo desea es una fijación durante todo el día con pestañas postizas que sean fáciles de aplicar y que no dañen sus pestañas naturales.
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